Me gusta el mar
cuando ríe con boca
de espuma blanca.
El pez tiembla
en el agua al ver
sombras de hombre.
La luciérnaga
enciende la sonrisa
de la noche.
La libélula
azul centellea
como una estrella.
Árboles del río,
guardianes verdes
de peces invisibles.
El búho ulula
a la noche azul
mientras se despereza.
Pareciera que
el río interpreta
un canto de amor.
CUDILLERO
Las calles de mi pueblo tienen
serpenteantes surcos de piedra
y escalones interminables
que me llevan hasta el cielo.
Las casas de mi pueblo tienen
paredes blanqueadas
y pequeños ventanales
abiertos hacia el mar.
Las gentes de mi pueblo tienen
el mar fluyendo en sus venas
y un olor a salitre
que toda su vida penetra.
La mar de mi pueblo tiene
boca que besa y muerde:
besos de pez de plata,
mordiscos que a veces matan.
Mar, gentes, calles y casas
de mi añorado pueblo,
tenéis mi infancia atrapada
entre imborrables recuerdos.
Por eso, siempre que puedo,
regreso a Cudillero,
me sumerjo en su mar,
respiro su brisa
y, mientras me voy,
sueño que vuelvo.
Acuarela, papel, 40×30 cm.
Acuarela, papel, 46x32 cm. Acuarela, papel, 32x25 cm.
Tinta y acuarela. Papel. 38x22 cm. Tinta y acuarela. Papel. 40x30cm.
Acrílico sobre papel
Tamaño: 50 x 40 cm.
Vertical: acuarela y tinta sobre papel / 46 x 32 cm.
Horizontal: acrílico y tinta sobre papel / 51 x 40 cm.
